Entonces, ¿parece que tu pequeño realmente disfruta tomando sus medicamentos? Si bien puede facilitar las cosas, existen consejos importantes que todo padre debe saber para mantener a sus hijos seguros y saludables. ¡Exploremos cómo puedes afrontar esta complicada situación con facilidad!
Comprender la apelación
«¿Cómo consigo que mis hijos tomen medicamentos?» Ésta es una pregunta que se plantean muchos padres. ¿Pero qué pasa si el problema es el contrario? Con medicamentos diseñados para saber a caramelo, los niños pueden disfrutarlos demasiado. Las vitaminas gomosas y los jarabes de sabor dulce son un éxito entre los niños, pero también plantean un peligro oculto: la posibilidad de ingestión accidental o consumo excesivo.
Mantenga los medicamentos fuera de su alcance
La primera línea de defensa es almacenar medicamentos de forma segura. Asegúrese de que todos los medicamentos se guarden en gabinetes altos y cerrados con llave. Si los visitantes o invitados traen medicamentos, asegúrese de que también los guarden en un lugar seguro, lejos de manos curiosas.
Educa a tus hijos
Es crucial Educar a los niños sobre la importancia de la medicina. y su uso adecuado. Explique que los medicamentos son útiles sólo cuando los administran los padres o el médico y que demasiados pueden enfermarlos gravemente. Las discusiones tempranas sobre el papel y los riesgos de los medicamentos pueden inculcar hábitos responsables a medida que crecen.
Manejar las solicitudes de medicamentos de manera adecuada
Si su hijo le pide medicamentos con frecuencia, tómese un momento para comprender por qué. ¿Realmente se sienten mal o buscan un dulce o atención? Trate de abordar la razón subyacente con respuestas adecuadas, como ofrecer consuelo y atención por otros medios.
Evite el uso de medicamentos como primer recurso
Siempre que sea posible, trate de utilizar remedios no medicinales para problemas menores. Por ejemplo, un bebé al que le están saliendo los dientes puede encontrar alivio con una toallita fría en lugar de dosis inmediatas de analgésico. Esto no sólo minimiza la ingesta de medicamentos, sino que también les enseña a los niños que existen múltiples formas de sentirse mejor.
Monitorear y comunicar
Esté atento a cómo responden sus hijos a los medicamentos y comunicate con tu pediatra. Antes de administrar cualquier medicamento, vitamina o suplemento nuevo, es aconsejable consultar a un profesional de la salud, especialmente si su hijo ya está tomando medicamentos recetados.
Enseñar el uso responsable de los medicamentos
Parte de criar adultos responsables es educarlos sobre cómo manejar los medicamentos de manera segura. A medida que crezcan, enséñeles a administrar sus medicamentos ellos mismos: reconociendo los síntomas, usando la dosis correcta y comprendiendo la importancia de no tomarlos solo porque saben bien. A continuación se ofrecen algunos consejos:
- Explique que los medicamentos son sólo para cuando son necesarios, no porque sepan bien.
- Demostrar el almacenamiento adecuado de los medicamentos fuera de su alcance.
- Analice las graves consecuencias de tomar demasiados medicamentos.
- Anímelos a hablar con usted o con un proveedor de atención médica si tienen alguna pregunta sobre los medicamentos.
Preparación para emergencias
A pesar de los mejores esfuerzos, pueden ocurrir accidentes. Mantener el línea directa de control de intoxicaciones (800-222-1222) fácilmente accesible y saber cuándo pedir ayuda. Si su hijo ingiere demasiados medicamentos o intenta replicar comportamientos riesgosos que se ven en línea, es fundamental buscar atención médica inmediata.